Iglesia Adventista del Séptimo Día – Institucional

La observancia del sábado

Propósito y perspectiva

El objetivo principal de este documento sobre la observancia del sábado es proporcionar consejo o directivas a los miembros de iglesia que desean una experiencia más rica y más significativa en la observancia del sábado. Se espera que éste ofrezca motivación a nivel mundial y que conduzca a una auténtica reforma en la observancia del sábado. Conscientes del hecho de que la comunidad religiosa mundial enfrenta numerosos problemas en la observancia del sábado, los que surgen en una cultura y contexto ideológico dado, se ha hecho un esfuerzo por tomar en cuenta estas dificultades. No es la intención de este documento contestar cada pregunta relacionada con la observancia del sábado, sino presentar los principios bíblicos y las orientaciones dadas por el Espíritu de Profecía que ayuden a los miembros de iglesia en su esfuerzo por seguir la dirección del Señor. Se espera que los consejos dados en este documento sean una ayuda, pero la decisión final que debe hacerse bajo circunstancias críticas tiene que estar motivada por la fe y la confianza personal en el Señor Jesucristo.

El sábado—Una salvaguardia de nuestra relación con Dios

El sábado abarca nuestra total relación con Dios. Es una indicación de la acción de Dios en nuestro favor en el pasado, el presente y el futuro. El protege la amistad del hombre con Dios y ofrece el tiempo esencial para el desarrollo de esa relación. El sábado aclara la relación entre Dios y la familia humana, porque señala a Dios como Creador en un momento cuando a los seres humanos les gustaría usurpar la posición de Dios en el universo. En esta era materialista, el sábado señala a hombres y mujeres lo espiritual y personal. Las consecuencias de olvidar el sábado como un día santo son serias, ya que llevan a la distorsión y eventual destrucción de la relación del individuo con Dios. Cuando se observa el sábado, se da un testimonio para los demás de lo que vendrá por confiar sólo en Dios como nuestro sustentador, la base de nuestra salvación y el fundamento de nuestra esperanza en el futuro. Como tal, el sábado es una delicia porque hemos entrado en el descanso de Dios y hemos aceptado la invitación de tener comunión con él. Cuando Dios pide recordar el día sábado, lo hace porque quiere que lo recordemos a él.

Principios y teología de la observancia del sábado

  1. Naturaleza y propósito del sábado. El origen del sábado se encuentra en la mismacreación (Gén. 2:1-3). El sábado tiene significado como señal perpetua del pactoentre Dios y su pueblo, para que supiesen quién era Aquel que los había creado (Éxo.31:17) y los santificaba (Éxo. 31:13; Eze. 20:12), y conocieran que él era su Señor yDios (Eze. 20:20).
  2. La unicidad del sábado. El sábado es una ocasión especial para adorar a Dios comoCreador y Redentor, y como Señor de la vida con quien la familia humana se reunirá en susegunda venida. El mandamiento del sábado forma el centro de la ley moral como sello de la autoridaddivina. Ya que este es un símbolo de la amante relación de Dios con sus hijos terrenales, losseres humanos están en la obligación de respetar este don en el sentido de que harántodo lo que esté en su poder hacer para promover y participar de actividades que los ayuden aestablecer y realzar una relación duradera con Dios. Por lo tanto, su pueblo se comprometerásólo en aquellas actividades dirigidas a Dios y a sus semejantes, y no en aquellas que llevan a lagratificación e intereses personales.
  3. La universalidad del sábado. La universalidad del sábado está arraigada en laCreación; por lo tanto sus privilegios y deberes son obligatorios para todas las naciones, sectores oclases (ver Éxo. 20:11; 23:12; Deut. 5:13; Isa. 56:1-8). La observancia del sábado pertenece atodos los miembros del hogar, inclusive los hijos; y se extiende aún “al extranjero que habitaen medio de ti” (Éxo. 20:10).
  4. Tiempo de duración del sábado. Información bíblica: El sábado comienza alfinal del sexto día de la semana y dura un día, de tarde a tarde (Gén. 1; Mar. 1:32).Este tiempo coincide con el horario de la puesta del sol. Como es muy difícil lograr una clarademarcación del tiempo de la puesta del sol, la observancia del sábado comenzará alfinal del día, marcado por la disminución de la luz.
  5. Principios orientadores para la observancia del sábado. A pesar de que la Biblia no tratadirectamente muchas de las preguntas específicas en relación con la observancia delsábado, nos ofrece principios generales que son aplicables en nuestros días (ver Éxo.16:29; 20:8-11; 34:21; Isa. 58:13; Neh. 13:15-22). “La ley prohíbe el trabajo secular en eldía de reposo del Señor; debe cesar el trabajo con el cual nos ganamos la vida; ninguna laborque tenga por fin el placer mundanal o el provecho es lícita en ese día; pero como Diosabandonó su trabajo de creación y descansó el sábado y lo bendijo, el hombre hade dejar las ocupaciones de su vida diaria, y consagrar esas horas sagradas al descanso sano, al culto y alas obras santas” (El Deseado de todas las gentes, p. 177). Este concepto, sin embargo, no es un apoyopara una inactividad total. Tanto el Antiguo Testamento como el Nuevo Testamento nos invitan a atender lasnecesidades y aliviar los sufrimientos de los demás, porque el sábado es un buen díapara todos, especialmente para los oprimidos y de baja posición (Éxo. 23:12; Mat. 12:10-13;Mar. 2:27; Luc. 13:11-17; Juan 9:1-21) A pesar de realizar buenas obras durante el sábado,éstas no deberían oscurecer la característica bíblica principal de laobservancia del sábado, es decir, descansar (Gén 2:1-3). Esto incluye tanto el descansofísico como el espiritual (Éxo. 23:12) en Dios (Mat. 11:28). Esto último lleva alobservador del sábado a buscar la presencia y la comunión con Dios mediante laadoración (Isa. 48:13), tanto en la meditación tranquila (Mat. 12:1-8) como en el cultopúblico (Jer. 23:32; 2 Rey. 4:23; 11:4-12; 1 Crón. 23:30; Isa. 56:1-8). Su objetivo esreconocer a Dios como Creador y Redentor (Gén. 2:1-3; Deut. 5:12-15), lo que debería sercompartido con la propia familia y la comunidad mayor (Isa. 56:1-8)
  6. El sábado y la autoridad de la Palabra de Dios. Elena de White destaca el hecho de que el mandamientodel sábado es único, porque contiene el sello de la ley de Dios. Este es el único delos mandamientos que contiene tanto el nombre como el título del Legislador. Declara que es elCreador del cielo y de la tierra, y revela así el derecho que tiene para ser reverenciado y adoradosobre todos los demás. Aparte de este precepto, no hay nada en el Decálogo que muestrequé autoridad fue la que promulgó la ley (Conflicto de los siglos, pp. 504, 505)
  7. El sábado es la señal que muestra al Creador como propietario y autoridad. Una observanciasignificativa del sábado indica, por lo tanto, que se acepta a Dios como Creador y Propietario y sereconoce su autoridad sobre toda la creación, incluyéndose uno mismo. La observancia delsábado se basa en la autoridad de la Palabra de Dios. No existe otra razón lógica paraello; así, los seres humanos tienen la libertad de entrar en una relación con el Creador deluniverso como con un amigo personal. Es posible que los observadores del sábado tengan a veces queenfrentar resistencia debido a su compromiso con Dios de guardar el santo sábado. Para quienes noreconocen a Dios como su Creador, parece arbitrario o inexplicable que alguien deje todo trabajo durante eldía sábado meramente por razones religiosas. La observancia significativa del sábadotestifica el hecho de que hemos elegido obedecer los mandamientos de Dios. De esta forma reconocemos quenuestra vida la vivimos ahora en obediencia a la Palabra de Dios. El sábado será una pruebaespecial al fin del tiempo. El creyente tendrá que elegir entre ser fiel a la Palabra de Dios o a laautoridad humana (Apoc. 14:7- 2).

El hogar y la vida familiar en conexión con el sábado

  1. Introducción. La vida de hogar es la piedra fundamental de una adecuada observancia delsábado. Cuando las personas guarden conscientemente el sábado en su hogar y acepten susresponsabilidades como miembros de la familia, sólo entonces podrá la iglesia mostrar al mundoel gozo y los privilegios del santo día de Dios.
  2. Diferentes tipos de hogares. En el siglo XX existen diferentes clases de hogares; por ejemplo, el hogardonde está el esposo, la esposa y los hijos; el hogar donde los esposos no tienen hijos; el hogardonde está sólo el padre o la madre y los hijos (donde por causa de muerte o divorcio, uno delos padres debe actuar en los papeles de padre y de madre); el hogar en el cual la persona no se ha casadonunca o donde la muerte o el divorcio la han dejado sola y no hay hijos involucrados; y estátambién el hogar donde sólo uno de los padres es miembro de iglesia. Al atender lasnecesidades y los problemas de estas diferentes categorías, debiera entenderse que algunos de losprincipios y las sugerencias enunciados se pueden aplicar a todos los grupos y que otros son másespecializados.
  3. Dos instituciones sagradas: el hogar y el sábado. “En el principio” Dios; colocó aun hombre y a una mujer en el Jardín del Edén, el cual sería su hogar. También“en el principio” Dios dio a los seres humanos el sábado. Estas dos instituciones, elhogar y el sábado, van juntas. Ambas son dones de Dios; por lo tanto, ambas son sagradas. Laúltima enriquece de una forma única los lazos de la primera. La comunión íntimaes un elemento importante en el hogar. La comunión íntima con otras personas también esun elemento importante del sábado. Visto desde esta perspectiva, no se puede minimizar la importanciadel sábado para el hogar.
  4. Responsabilidades de los adultos como maestros/as. Cuando Dios eligió a Abraham como padre de supueblo elegido, dijo: “Porque yo sé que mandará a sus hijos y a su casa despuésde sí” (Gén. 18:19). Entonces, es claro que a los adultos les ha sido entregada unaenorme responsabilidad en cuanto al bienestar espiritual de sus hijos. Tanto por precepto como por ejemplo,deben estos ofrecer ese tipo de estructura y atmósfera que hará del sábado una deliciay una parte tan vital en la vida del cristiano, para que, mucho después que los hijos hayanabandonado el hogar, continúen con la costumbre que se les enseñó cuando niños.En armonía con el mandato: “Les enseñarás [los mandamientos de Dios]diligentemente a tus hijos” (ver Deut. 6:4-9), los adultos de la familia les enseñarán asus hijos a amar a Dios y guardar sus mandamientos. Deberían enseñarles a ser leales a Dios yseguir sus directivas. Desde su más tierna infancia los niños debieran ser enseñados aparticipar en el culto familiar, para que el culto en la casa de Dios sea una extensión de unacostumbre familiar. También desde la infancia debiera enseñarse a los niños laimportancia de asistir a la iglesia; pues laverdadera observancia del sábado incluye la asistencia ala casa de Dios para adorar y estudiar la Biblia. Los adultos de la familia deben dar el ejemplo asistiendoa los cultos el sábado, dando así un modelo que los hijos verán como importante cuandoles toque decidir sobre las cosas que realmente valen en la vida. Los niños deben serenseñados del significado del sábado, de su perdurabilidad y la relación queéste tiene con la vida cristiana, por medio de conversaciones, y a medida que crecen y maduran, pormedio del estudio de la Biblia.
  5. Preparación para el sábado. Si el sábado ha de ser observado en forma adecuada,entonces toda la semana debiera programarse de tal forma que cada miembro esté listo para dar labienvenida al santo día del Señor cuando éste llegue. Esto significa que los miembrosadultos de la familia harán planes para que las tareas —compra y preparación dealimentos, ropas listas, y otras necesidades de la vida diaria— estén terminadas antes de lapuesta del sol del viernes. El día de reposo debiera ser el eje central alrededor del cual gira todala semana. Cuando ya viene la tarde del viernes y la puesta del sol se acerca, los adultos y losniños debieran estar listos para, con mente tranquila, preparativos terminados y el hogar listo, darla bienvenida al sábado; entonces todo estará en orden para pasar las próximas 24 horasen comunión con Dios y con nuestros hermanos. Los niños pueden ayudar para que se logre estapreparación si se les responsabiliza de algunos preparativos, lógicamente de acuerdo con sumadurez. La forma como la familia enfoca el comienzo del sábado a la puesta del sol del viernes, y laforma como utiliza esa noche, dará el escenario para la recepción de las bendiciones que elSeñor ha guardado para todo el día que vendrá.
  6. Vestimenta adecuada para el sábado. En los hogares donde hay niños, los sábados demañana, mientras la familia se viste para ir a la iglesia, los adultos pueden, por precepto yejemplo, enseñar a los niños que una forma de honrar a Dios es presentarse en su casa limpios,con ropas representativas y adecuadas a la cultura en que viven.
  7. Importancia de las horas de estudio de la Biblia. Cuando los niños no tienen el privilegio de asistira una escuela adventista, la escuela sabática se convierte en el medio más importante—fuera del hogar— para la instrucción religiosa. No puede sobreestimarse el valor de estahora de estudio de la Biblia. Es por esta razón que los padres debieran asistir a los cultosmatutinos del sábado y hacer todo lo posible por llevar a sus hijos con ellos. 8) Las actividades dela familia durante el sábado. En la mayoría de las culturas, la hora del almuerzosabático, cuando la familia está reunida alrededor de la mesa familiar, es el momentoculminante de la semana. El espíritu de gozo y sagrada comunión que comenzó allevantarse y aumentó durante los cultos en la iglesia, ahora se intensifica. Al quedar libres de lasdistracciones seculares, la familia puede conversar de temas de interés mutuo y mantener el ambienteespiritual del sagrado día. Cuando se comprende que el sábado es sagrado, y ademásexiste una relación cariñosa entre padres e hijos, todos colaborarán para que durantelas horas sagradas se evite la música secular, la radio, los programas de TV, los periódicos,los libros y las revistas seculares. En la medida de lo posible, los sábados de tarde debieranrealizarse actividades con la familia: explorar la naturaleza, hacer visitas misioneras a presidiarios, aenfermos y a otros que necesiten de ánimo, y participar en la reunión de jóvenes en laiglesia. Cuando los niños son más grandes, las actividades se ampliarán para abarcar aotros amigos de la iglesia de su misma edad, teniendo siempre en mente la pregunta: “¿Meayudará esta actividad a comprender mejor la verdadera naturaleza y santidad delsábado?” Al observar en forma adecuada el sábado, el hogar tendrá una influenciaperdurable en el tiempo y para la eternidad.

La observancia del sábado y las actividades recreativas

  1. Introducción. La observancia del sábado incluye tanto el culto como la comunión. Lainvitación para gozar de ambos es amplia y generosa. El culto de adoración sabáticoestá dirigido a Dios y generalmente se realiza en medio de la comunidad creyente. Esta mismacomunidad ofrece comunión. Tanto el culto como la comunión ofrecen un potencial ilimitado paraalabar a Dios y enriquecer nuestra vida como cristianos. Cuando se distorsiona el culto o lacomunión, o se abusa de ambos, se amenaza la alabanza a Dios y el enriquecimiento personal. Elsábado, como un don a través del cual el mismo Dios se entrega a nosotros, es un gozo real enel Señor. También es la oportunidad para que los creyentes reconozcan y alcancen todo esepotencial que Dios les da. Es por esto que el sábado es una delicia para los creyentes.
  2. Factores ajenos a la observancia del sábado. Fácilmente pueden introducirse elementos ajenosal espíritu sabático. El creyente debe estar siempre alerta a los factores ajenos quepodrían menoscabar su comprensión de la santidad del sábado en su experiencia deadoración y de comunión. El sentido de santidad del sábado es particularmente amenazadopor tipos de comunión y actividades erróneas. Al contrario de esto, la santidad delsábado es realzada cuando el Creador permanece como el centro del santo día.
  3. Fenómeno de condicionamiento cultural en la observancia del sábado. Es importante comprenderque los cristianos rinden obediencia a Dios y que, por lo tanto, observan el sábado en el ambientecultural e histórico del lugar donde viven. También es posible que tanto la historia como lacultura condicionen y distorsionen falsamente nuestros valores. Apelando a la cultura podríamos serculpables de permitirnos o excusarnos por condescender con actividades deportivas o recreativasincompatibles con la santidad del sábado. Por ejemplo, ejercicio físico intenso y diversasformas de turismo que están fuera de armonía con la verdadera observancia del sábado.Cualquier intento por reglamentar la observancia del sábado más allá de los principiosbíblicos, como sería hacer una lista de prohibiciones sabáticas, es contrario a unaexperiencia espiritual sana. Los principios serán la medida que el cristiano utilizará para supropia experiencia sabática. Sabe que, el propósito fundamental del sábado esfortalecer los lazos de unión con su Dios; por lo tanto, son aceptables todas las actividades guiadaspor principios bíblicos que contribuyen a ese fortalecimiento. Nadie puede evaluar correctamente losmotivos personales de los otros; por esto, un cristiano debe ser muy cuidadoso y no criticar a sus hermanosque viven en un contexto cultural diferente al suyo. Durante los viajes, los turistas adventistas debieranhacer todo lo posible para observar el sábado con sus hermanos creyentes en cualquier áreadonde se encuentren. Para respetar la santidad del séptimo día se recomienda que losadventistas eviten usar el día sábado como un feriado utilizándolo para visitar yrealizar actividades seculares.

Las iglesias y las instituciones de la iglesia

Establecer pautas y reglamentos específicos para la iglesia y sus instituciones como un todo, es ofrecer a la hermandad un ejemplo de observancia del sábado. Es responsabilidad de los miembros aplicar en sus propias vidas los verdaderos principios de la observancia del sábado. La iglesia puede proveer de principios tal como se encuentran en la Biblia y en el Espíritu de Profecía, pero no puede actuar como conciencia para sus miembros.

  1. Iglesias—Papel de la iglesia y de la familia en las actividades del sábado de tarde. A lospastores y dirigentes de la iglesia se les ha confiado la responsabilidad de planificar cuidadosamente lasactividades para los niños, jóvenes, adultos y ancianos, como también para las familiasy las personas solas. Al planificar, deben enfatizar la importancia de hacer del sábado un díade gozo, adoración y descanso. Las actividades de la iglesia debieran complementar y nunca reemplazarlas actividades de la familia y del hogar.
  2. Iglesias—Música para el sábado. La música tiene un poderoso impacto en elánimo y las emociones de la persona. Los dirigentes de la iglesia seleccionarán músicay músicos que realcen la atmósfera de adoración del descanso sabático y larelación de la persona con Dios. Los ensayos del coro debieran evitarse cuando ya existen otrasreuniones regularmente fijadas durante la hora en que piensan ensayar.
  3. Iglesias—Actividad misionera en la comunidad. Aunque los cristianos pueden participar en cierto tipode trabajo social en beneficio de estudiantes, de jóvenes y pobres de los barrios marginales, debentomar el cuidado de ejercer una influencia ejemplar y coherente de cómo observar el sábado. Sise participa en una escuela de extensión o en clases especiales para niños y jóvenes,pueden elegir temas y clases que sean diferentes de los temas seculares y comunes que dan durante la semana.Podrían ofrecer actividades que contribuyan a la cultura espiritual. Paseos por el vecindario o juntoa la naturaleza pueden sustituir a los recreos; caminatas o excursiones en medio de la naturaleza, queexijan sólo un esfuerzo mínimo, pueden sustituir a las materias o aulas seculares.
  4. Iglesias—Recolección. El procedimiento general de la Iglesia Adventista es que larecolección se realice en otro día que no sea el sábado. Donde se practica recolectaren sábado, debe existir un plan que ofrezca beneficios espirituales a todos los participantes.
  5. Iglesias—Recolección de fondos en sábado. La doctrina de la mayordomía cristianaes encontrada a través de todas las Escrituras. El acto de dar tiene un lugar definido durante loscultos. Cuando se apela a dar fondos, debe hacerse de tal manera que se preserve la santidad del culto y delsábado.
  6. Iglesias—Casamientos en sábado. La ceremonia matrimonial es sagrada, y en sí misma noestá en desarmonía con el espíritu de observancia del sábado. Sin embargo, lamayoría de los casamientos exige mucho trabajo y en los preparativos para la recepción es casiinevitable que surja un ambiente secular. Para que el espíritu del sábado no se pierda,debería desanimarse la realización de casamientos en este día.
  7. Iglesias—Funerales en sábado. En forma general, los adventistas debieran evitar realizarfunerales durante el sábado. Es verdad que en ciertos climas y circunstancias puede ser necesario quese realice sin demora el funeral, a pesar de ser sábado. En esos casos, debieran hacerse los arreglospor adelantado con la empresa fúnebre y con los empleados del cementerio, y de esta forma reducir eltrabajo durante el sábado. En algunos casos puede realizarse un culto el sábado y dejar elentierro para el día siguiente.
  8. Las instituciones de salud de la Iglesia Adventista. Las instituciones de salud ofrecen a muchas personas suúnica oportunidad de contacto con la Iglesia Adventista. Los hospitales adventistas deben ser muchomás que meros sistemas que ofrecen cuidado de la salud. Estos tienen la oportuni- dad única deser un testimonio cristiano a la comunidad que sirven, las 24 horas del día. Además, tienen elprivilegio de presentar el mensaje del sábado por el ejemplo cada semana. En la cura de los enfermosy en la liberación de los portadores de debilidades físicas aún en sábado,Cristo dejó un ejemplo que consideramos la base para el establecimiento y funcionamiento de lasinstituciones médicas adventistas. Es por este motivo que una institución que ofreceatención médica al público, debe estar preparada para ministrar las necesidades delenfermo y doliente, sin tomar en cuenta la hora o el día. Este enfoque pone una gran responsabilidadsobre cada institución para que planifique y ejecute reglamentos que reflejen el ejemplo de Cristo yapliquen los principios bíblicos de la observancia del sábado enseñados en la IglesiaAdventista.
    Los administradores tienen una responsabilidad especial para tratar de que todos los departamentos mantengan el verdadero espíritu de la observancia del sábado, instituyendo procedimientos adecuados y evitando la laxitud en la observancia del séptimo día. Se recomienda la aplicación de los siguientes principios para la observancia del sábado:
  9. Proporcionar, cuando sea necesario, cuidado médico de emergencia voluntario, alegre y de elevadonivel de excelencia. Sin embargo, no deberían las instituciones y médicos adventistas ofrecerel mismo tipo de atención o servicio clínico durante el sábado como lo hacen durante lodías de la semana.
  10. No continuar con las actividades de rutina que pueden postergarse. Eso significa que deben cerrarse todoslos servicios y departamentos que no están relacionados directamente con el paciente, y que debemantenerse una cantidad mínima de personal calificado en otros departamentos para atenderemergencias.
  11. Postergar diagnósticos y servicios terapéuticos electivos. Las decisiones sobre qué esnecesario o de emergencia, debieran ser hechas por el médico que atiende. Si se abusa de esteprivilegio, la administración del hospital debiera intervenir. Los funcionarios de lainstitución que no trabajen en la administración, no deben involucrarse en las decisiones, niser obligados a enfrentar al(a los) médico(s) de turno. Se pueden evitar malos entendidos si se dejaclaro, en las reuniones y en los reglamentos, que sólo se realizarán aquellas cirugías,diagnósticos o tratamientos terapéuticos que son impostergables dada la condición delpaciente. En el momento de contratar al personal se puede dejar en claro todo esto, y eso ayudará aevitar abusos y malos entendidos. Se debería desalentar, e incluso limitar en los viernes, lascirugías convenientes o programadas para el sábado. Si se procediera de otro modo, se lepermitiría al paciente estar en el sanatorio u hospital todo el fin de semana, por lo queperdería pocos días de trabajo. Sin embargo colocaría el primer díapostoperatorio, por lo general con el cuidado y la atención profesional más intensos, ensábado.
  12. Cerrar las oficinas de administración y contabilidad para atendimientos de rutina. Aunquepodría ser necesario admitir o dar de alta a los pacientes en sábado, se recomienda evitar laentrega de recibos o recepción de dinero. Jamás debiera ser la guardia del sábado unmotivo de irritación para aquellos que tratan de servir y salvar; sino por el contrario, que sea undistintivo de que son “hijos de la luz” (Efe. 5:8; Los hechos de los apóstoles,pág. 214).
  13. Hacer del sábado un día agradable para los pacientes, un día cuando la intensaactividad de la rutina sea puesta de lado y el personal esté libre para pasar más tiempo conlos pacientes, para instruirlos, aconsejarlos y familiarizarlos con el maravilloso amor de Dios. Unaactividad misionera como ésta es un recuerdo de testimonio cristiano que los pacientes nuncaolvidarán. La observancia significativa del sábado será conseguida mucho másfácilmente en una institución que emplee un equipo predominantemente adventista. Es posiblepara los empleados creyentes presentar el sábado en una luz adecuada mientras cuidan de lospacientes, y pueden perfectamente bien ser una influencia convincente en las vidas de quienes no son denuestra fe.
  14. El cuidado directo del enfermo es una actividad de siete días de la semana. La enfermedad no tienecalendario. Sin embargo, cuando se prepara el horario del personal, las instituciones de salud debierantomar en cuenta las creencias religiosas sinceras, la observancia y las prácticas de cada empleado ofuturo empleado. Las instituciones debiera hacer arreglos razonables para tales creencias religiosas, amenos que se demuestre que tales acomodaciones dificultarán el funcionamiento de lainstitución. Se reconoce que la conciencia del individuo varía en relación con eladecuado empleo del sábado. Ni la iglesia ni sus instituciones pueden actuar como la conciencia desus empleados. En lugar de esto, deberían hacerse ajustes razonables en beneficio de la concienciaindividual.
  15. Resistir las presiones para rebajar las normas adventistas. Algunas instituciones han recibido presiones dela comunidad, del equipo médico y/o de empleados (donde la mayoría no es adventista) paraabandonar o debilitar los principios de la observancia y las prácticas en el sábado, de modoque éste sea tratado como cualquier otro día. En algunos casos se ha ejercido presiónpara mantener todos los servicios durante el sábado y disminuirlos el domingo. Debe resistirsedecididamente una acción tal. La condescendencia puede provocar un serio análisis de larelación de esa institución con la iglesia.
  16. Enseñar a los empleados no adventistas los principios practicados por la institución enrelación con el sábado. Cada empleado no adventista, en el momento de su contrato con unainstitución adventista de salud, debiera ser advertido acerca de los principios de la iglesia,especialmente de los reglamentos institucionales que tienen que ver con la observancia del sábado.Aunque los no adventistas no crean como nosotros, debieran de todas formas conocer desde el principio laforma en que se espera que ellos calcen en el programa de la institución, para ayudar a ésta aalcanzar sus objetivos.
  17. Estimular en los empleados adventistas una actitud de continua testificación cristiana. Elúnico contacto que muchos empleados no adventistas pueden tener con los adventistas, puede ser en lainstitución que los emplea. Toda relación debiera ser amistosa, amable y una expresióndel amor que ejemplifica la vida y la obra del gran Médico. La compasión por el enfermo, laconsideración generosa por sus colegas, una voluntad de servir, una ilimitada lealtad a Dios y a laiglesia pueden ser sabor de vida para vida. Guardar el sábado es un privilegio y un honor tanto comoun deber. Nunca debiera ser una carga o una molestia para aquellos que lo guardan o para aquellos que nosrodean.
  18. Trabajo en sábado en hospitales no adventistas. Aunque es esencial que en las institucionesmédicas se realice un mínimo de trabajo todo el tiempo para poder mantener el bienestar y lacomodidad de los pacientes, los empleados adventistas que trabajan en instituciones no denominacionales,donde en las horas de sábado no se alivian de la rutina del deber, están bajo laobligación de recordar los principios que reglamentan todas las actividades sabáticas. Paraevitar situaciones donde nuestros miembros de iglesia podrían enfrentar problemas para guardar elsábado, hoy se recomienda que:
    1. Cuando los adventistas aceptan empleos en hospitales no adventistas, manifiestan sus principios de observancia del sábado y solicitan un horario que los libere de trabajo en sábado.
    2. Donde los horarios de trabajo y otros factores hagan esto imposible,los adventistas debieran claramente identificar los deberes, si los hubiere, que puedan conscientemente realizar el sábado, y la frecuencia de los mismos de allí en adelante. Entendemos que sólo en caso de epidemia, accidentes en los que muchas personas están involucradas u otras situaciones de emergencia regional, los llevará a prestar el servicio humanitario propio de todo trabajo médico o paramédico.
    3. Donde no se pueda realizar ninguno de los arreglos mencionados arriba, los miembros debieran hacer de su lealtad a los requerimientos de Dios lo máximo y abstenerse del trabajo rutinario.
    4. Las instituciones educativas adventistas. Los colegios adventistas con internado tienen un papel importante en la formación de hábitos de observancia del sábado en las futuras generaciones de miembros de iglesia. De la misma forma lo tienen los colegios y las universidades al moldear el pensamiento de la clase pastoral profesional. Es por lo tanto importante que en estas instituciones tanto la teoría como la práctica, de cómo aumentar el gozo de las bendiciones sabáticas, se acerquen lo máximo posible al ideal. La aplicación de estos principios incluye:
      1. Preparación adecuada para el sábado.
      2. Demarcación del comienzo y del fin de las horas del sábado.
      3. Actividades adecuadas hogar-escuela: cultos, grupos de oración, testificación, etc.
      4. Mantener los deberes necesarios al mínimo; de preferencia confiarlos a personas para quienes sea un servicio voluntario, y no utilizar aquellas para quienes ese mismo trabajo es pagado durante la semana.
      5. Cultos inspiradores, de preferencia que sirvan como modelo de aquello que se espera caracterice los cultos en las iglesias de las escuelas.
      6. Actividades variadas y adecuadas para los sábados de tarde.
      7. Estructuración del programa semanal, para que el sábado sea un gozo prolongado y el clímax de la semana, en lugar de ser el preludio para las actividades totalmente diferentes del sábado de noche.
  19. Ventas en el comedor. Las cafeterías de los colegios han sido designadas para servir a losestudiantes y a sus padres visitantes e invitados; no debieran abrirse al público durante elsábado. Para evitar transacciones comerciales innecesarias durante las horas sagradas, cadainstitución debe establecer formas de pago fuera de las horas sabáticas.
  20. Asistencia del personal docente a reuniones profesionales. En algunos países, los adventistas tienenel privilegio de asistir a reuniones profesionales para estar al día con el desarrollo de su campo deespecialización. Podría ser una tentación justificar la asistencia en sábado aesas reuniones. Sin embargo, se recomienda que el personal académico se una con sus hermanos deiglesia para la adoración a Dios, y no se reúna con sus colegas profesionales “entrabajo”.
  21. Estaciones de radio. Las estaciones de radio pueden ser una bendición en sus comunidades. Paraaumentar las bendiciones, la programación durante las horas del sábado debiera reflejar lafilosofía de la iglesia. Si se hacen llamados para levantar fondos durante el sábado,éstos debieran hacerse de manera tal que se mantenga la santidad de este día.
  22. Viajes de promoción. Para mantener el espíritu de total adoración durante elsábado, los Tours de Promoción deben ser planificados de forma que disminuyan los viajes ensábado y ofrezcan un máximo de tiempo para la adoración con los creyentes. Las horasdel sábado no deben usarse para viajar con el fin de ofrecer programas de sábado de noche.
  23. La observancia del sábado en la formación de los pastores. Los pastores tienen una granresponsabilidad con su ejemplo personal, pues deben moldear la vida espiritual de la iglesia. Por lo tanto,las instituciones que preparan a los pastores y esposas de pastores necesitan ayudar a sus estudiantes aformar una saludable filosofía de la observancia del sábado. Una orientación adecuadarecibida en el colegio puede ser un instrumento en la experiencia de una genuina renovación del gozosabático en sus propias vidas, tanto como en la vida de su iglesia.
  24. Exámenes en sábado. Los adventistas que enfrentan exámenes exigidos en sábado encolegios no adventistas, o los profesionales que procuran certificación del ministerio deeducación, enfrentan un problema especial. Al manejar tales situaciones, recomendamos hacer arreglospara que los exámenes no sean en sábado. La iglesia debiera estimular a sus miembros a unacuidadosa observancia del sábado y, cuando sea posible, debiera interceder delante de las autoridadescorrespondientes para que permitan la posibilidad de rendir los exámenes en otro día, parareverenciar el día de Dios.

Empleos seculares y de negocios cuando se relacionan con el sábado

  1. Declaración de principio. La visión bíblica del sábado incluye unadimensión divina y otra humana (Mat. 12:7). Desde la perspectiva divina, el sábado invita alcreyente a renovar su compromiso con Dios al desistir del trabajo diario para poder adorar a Dios máslibre y completamente (Éxo. 20:8-10; 31:15, 16; Isa. 58:13, 14). Desde la perspectiva humana, elsábado ordena al creyente que celebre el amor creador y redentor de Dios mostrando misericordia ypreocupación hacia los demás (Deut. 5:12-15; Mat. 12:12; Luc. 13:12; Juan 5:17). De esta formael sábado incluye la cesación del trabajo secular, con el propósito de honrar a Dios yrealizar acciones de amor y bondad hacia su prójimo.
  2. Trabajo esencial y de emergencia. Para mantener la santidad del sábado, los adventistas deben hacerelecciones sabias en materia de empleo, orientados por una conciencia iluminada por el EspírituSanto. La experiencia ha mostrado que existe un peligro en la elección de vocaciones que no permitenadorar al Creador con libertad durante el día sábado. Esto significa que deberíanevitarse aquellos empleos que, aunque esenciales para el funcionamiento de una sociedadtecnológicamente avanzada, puedan ofrecer problemas para la observancia del sábado. LasEscrituras y el Espíritu de Profecía son claros en cuanto a nuestros deberes como cristianoshacia nuestros semejantes, aún durante el sábado. En el contexto moderno, a muchos queestán empleados en profesiones que involucran la salvación de la vida y la propiedad se losllama a atender emergencias. Los arreglos para trabajo regular durante los fines de semana, con el objetivode ganancias extras, exigirán el uso de las horas de sábado, o aceptar trabajar sólolos fines de semana en profesiones de emergencia con el fin de aumentar el presupuesto familiar, lo cual noestá en armonía con los principios de observancia del sábado dados por Cristo. Es algototalmente diferente atender situaciones de emergencia donde la vida y la seguridad están en peligro,a ganar el diario vivir por emplearse en ocupaciones rutinarias durante el sábado, las que siempreestán acompañadas de actividades comerciales seculares o rutinarias (ver los comentarios deCristo al rescatar el buey o una oveja de un hoyo y ayudar a personas en necesidad; Mat. 12:11; Luc. 13:16).Ausentarse de la casa de Dios y ser privado del compañerismo con los hermanos en el sábado,puede enfriar la vida espiritual de la persona.
    Muchos patrones, en los llamados servicios esenciales,están dispuestos a buscar arreglos para los observadores del sábado. Donde no se garanticeesto, los miembros debieran revisar cuidadosamente los principios bíblicos de observanciasabática a la luz de esa actividad, ambiente, requisitos de trabajo y motivos personales, antes decomprometerse a trabajar en sábado. Debieran preguntar al Señor como lo hizo Pablo en su viajea Damasco: “Señor, ¿qué quieres que haga?” Cuando se tiene esta actitud defe, estamos convencidos de que Dios guiará a los creyentes a discernir su voluntad y dará lafuerza y sabiduría necesarias para hacer lo que corresponde.
  3. Decisiones morales en relación con la observancia del sábado. Las instituciones militares,educativas, gubernamentales y otras, muchas veces niegan o cortan los privilegios sabáticos. Paraprevenir y/o aliviar estas situaciones lamentables, debieran considerarse las siguientes sugerencias:
    1. Un dirigente de la iglesia, de preferencia el director de Relaciones Públicas de Libertad Religiosa, debe ser designado para mantenerse al día de los acontecimientos y las situaciones que puedan minar la libertad de culto en el día sábado. De ser necesario, este oficial se aproximará a las autoridades responsables con el fin de explicarles el impacto desfavorable sobre los adventistas de cualquier medida o legislación en proyecto. Este curso de acción puede prevenir la sanción de medidas que podrían, sin intención, cortar o negar los privilegios del sábado.
    2. Debe estimularse a los miembros adventistas a mantener por fe el principio de la observancia del sábado, sin tener en cuenta las circunstancias, y apoyarse en la seguridad de que Dios honrará su consagración.
    3. Los miembros de iglesia deben ofrecer ayuda espiritual, moral y, si es necesaria, temporal, para ayudar a otros miembros que pasan por problemas por causa del sábado. Tal ayuda servirá para fortalecer la consagración al Señor, no solamente de la persona que está enfrentando el problema del sábado sino también de la iglesia como un todo.
  4. Compra de mercaderías y servicios en sábado.
    1. El sábado está destinado para proporcionar libertad espiritual y alegría a todos (Éxo. 20:8-11). Como cristianos, debemos ser sostenedores de este derecho humano básico que ha otorgado el Creador a cada individuo. Como regla general, la compra de mercaderías, comidas en restaurantes y el pago de servicios hechos por otros deben ser evitados, porque no están en armonía con el principio ni con la práctica de la observancia del sábado.
    2. Además, las actividades comerciales recién mencionadas harían que la mente se dirigiera al secularismo en lugar de detenerse en la santidad del sábado (ver Neh. 10:31; 13:15 y siguientes). Con una adecuada planificación, se pueden tomar las debidas precauciones para que no falte nada de los necesario durante el sábado.
    3. Viajes en sábado. Aunque viajar en sábado puede ser necesario para poder cumplir con las actividades comprometidas para ese día, no se debe permitir que los viajes en sábado se conviertan en una función secular; por lo tanto, es necesario hacer los preparativos con anticipación. Antes del comienzo del sábado deben estar atendidos el combustible del auto y otras necesidades. Deben evitarse viajes por asuntos personales y de negocios.
    4. Cuando debe tratarse un problema específico de trabajo. Cuando un miembro de iglesia se encuentra en la necesidad de renunciar a un cargo, o pierde su trabajo por causa de problemas con el sábado, y es empleado por la denominación en un trabajo similar donde el nuevo trabajo, debido a su naturaleza básica, exige que el miembro trabaje en sábado, se recomiendan los siguientes pasos:
      1. Ofrecer al miembro una cuidadosa explicación del tipo esencial de trabajo.
      2. Asegurar al miembro que sólo los aspectos indispensables del nuevo trabajo se realizarán durante el sábado. También debieran explicar los administradores los propósitos religiosos de la organización que lo ha empleado.
      3. Adoptar un horario rotativo para que el miembro que conscientemente aceptó trabajar en sábado, pueda con frecuencia estar en condiciones de realizar una total celebración del día sábado.
  5. Turno de trabajo. Cuando un adventista trabaja para un empleador que acostumbra utilizar los turnos detrabajo, puede éste pedirle que trabaje el sábado o parte de él. En talescircunstancias, el miembro debe considerar lo siguiente:
    1. Tratar de ser el mejor trabajador posible, y un empleado tan valioso que su patrón no pueda prescindir de él.
    2. Si el problema continúa, puede apelar directamente al patrón y hacer un arreglo en base a su buena voluntad y justicia.
    3. Podría sugerirle al patrón arreglos tales como:
      1. Trabajar en un horario flexible;
      2. Tener los turnos que menos acepta el resto del personal;
      3. Negociar turnos con otros empleados; o
      4. Trabajar los feriados.
  6. Si el patrón se resiste a un arreglo, el miembro debería inmediatamente buscar la ayuda delpastor y del departamento de Relaciones Públicas y Libertad Religiosa en los países donde serealicen este tipo de actividades.

La Junta Directiva y el Congreso de la Asociación General (realizado en Indianápolis, Indiana, EE.UU.), en su sesión del 9 de julio de 1990, votaron acusar recibo de este documento acerca de la observancia del sábado.