El don espiritual: un regalo inigualable

¿Sabes identificar tus dones? ¿Y dónde crecerían cada vez más? Entender los diferentes dones que Dios le entrega a cada persona forma parte de un desarrollo único. En este material, conoce un poco más sobre los dones y, al final, descubre cuál de ellos vibra con más fuerza dentro de ti. ¡Trabaja en él, invierte en tus dones!

Por Denise M. Lopes, Directora del Ministerio de la Mujer y AFAM de la Unión Sur Brasileña. 

Todos los días recibimos varios regalos de Dios. Algunos suplen nuestras necesidades diarias de subsistencia, mientras otros hacen nuestra vida más plena y feliz, por ejemplo, la familia, las amistades y la libertad. Todos esos regalos son el reflejo del amor de Dios y el cuidado de nuestra felicidad. Sin embargo, existen otras dádivas que son concedidas y que no deben ser tratadas con indiferencia, como la salvación, la vida eterna y los dones espirituales. 

Trataremos un poco sobre esto último, los dones espirituales, que la Deidad nos concede con un propósito muy específico, y por esa razón lo estudiaremos por partes, de manera objetiva y sencilla. Para comenzar, será importante que tengan su Biblia para meditar en el texto de Mateo 25:13-30.  

¿Qué son los dones espirituales? 

Los dones espirituales son capacidades sobrenaturales, concedidas a los cristianos, por el Espíritu Santo, a fin de que puedan ministrar a otros por medio el fortalecimiento y la acción misionera.  

¿Notan el valor de ese regalo? Es algo sobrehumano porque cuando se desarrolla y usa ese don, es como un milagro comparado a lo que seríamos capaces de hacer, naturalmente, por nosotras mismas. Eso ocurre porque ese regalo lo concede alguien de la deidad, lo que deberíamos ver con un espíritu de temor, y al mismo tiempo de alegría, satisfacción y honor.  

¿Quién nos concede los dones?  

En 1 Corintios 12:1 y 4 leemos: “No quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los dones espirituales”. “Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo”.  

Este regalo es escogido y concedido por el Espíritu Santo. Él nos conoce mejor que nosotras mismas y también conoce la mente de Dios. Por lo tanto, el Espíritu nunca se equivoca al conceder el tipo o la cantidad de dones que nos concede. Cuando una persona dice que no tiene ningún don, o que no tiene nada para ofrecer para la propagación del reino de Dios, está dudando o desconociendo la capacidad y virtud del Espíritu Santo. Cuando alega que no está involucrada porque no sabe hacer lo que otros hacen o rechaza alguna invitación para la participación por no tener capacidad, también asume una posición de cuestionamiento acerca de la sabiduría de la deidad. Entonces, nunca cuestione “¿Por qué no recibí ese o aquel don?” La pregunta correcta es: “¿Qué don recibí?” 

¿Cuándo se reciben esos dones? 

            Los dones espirituales se nos conceden en el momento del nuevo nacimiento, en el bautismo. 

Cuando leemos Mateo 10, ese acto queda confirmado al observar que los discípulos recibieron muchos dones justamente cuando aceptaron a Cristo en ocasión del nuevo nacimiento. Al leer Hechos 2, verificamos que tiempo después fueren agregados otros dones en ocasión del Pentecostés. Lo mismo ocurre hoy. En el momento de la conversión y al entrar a ser parte del cuerpo de Cristo, recibimos por lo menos un don espiritual. No hay conversión sin que al mismo tiempo el Espíritu Santo conceda a la persona un don espiritual. Lo uno no ocurre sin lo otro. Sin embargo, estemos conscientes de que el Espíritu Santo puede conceder dones adicionales, en el momento que lo deseamos, a fin de atender las necesidades especiales para la realización de su obra y para su gloria.  

¿Para qué recibimos los dones espirituales?  

El Espíritu Santo no concede dones espirituales para servir al ego, sino para servir a Dios y unos a otros. 

Cuando nos concientizamos del don o dones espirituales, podemos iniciar el ministerio personal con confianza porque fuimos equipadas para hacer algo personal y especial. Estar equipadas no significa que los dones recibidos ya están totalmente desarrollados, sino simplemente que tenemos lo esencial para comenzar a hacer que ese don se manifieste, se haga visible.  

Todas somos mayordomas de nuestros dones espirituales y, por lo tanto, responsables por su desarrollo. Nunca debemos pensar que ya aprendimos o hicimos todo lo que podríamos aprender o hacer. Elena de White, en el libro La Educación, p. 124, al hablar sobre nuestro desarrollo personal, dice: “Aquel que con espíritu dócil y sincero estudia la Palabra de Dios para comprender sus verdades, se pondrá en contacto con su Autor y, a menos que sea por propia decisión, no tienen límite las posibilidades de su desarrollo”. 

¿Don espiritual es lo mismo que fruto espiritual? 

Es importante no confundir el fruto del espíritu con los dones espirituales. El fruto del Espíritu ayuda a definir como debe ser el cristiano para para habitar en el Reino. Los dones del Espíritu ayudan a definir lo que hace el cristiano por el reino de Dios.  

Los dones están orientados a la tarea u obra que el Espíritu efectúa por medio de nosotros para el cumplimiento de la misión, a fin de que no seamos hallados en falta cuando el Señor de la viña regrese. 

¿Don espiritual es lo mismo que talento natural? 

Los dones espirituales difieren de los talentos naturales, especialmente en la motivación y el objetivo con que son usados

¿Por qué es importante tener conocimiento sobre los dones espirituales? 

Dios no quiere que seamos ignorantes acerca de este tema porque es relevante para nuestra vida espiritual y la salvación (1 Corintios 12:1). 

El Señor no aconseja el uso del don; él ordena que lo usemos. El día del bautismo fuimos bautizadas por agua, para remisión de nuestros pecados, y bautizadas por el Espíritu para recibir el don (1 Timoteo 4:14). 

El Señor espera que seamos siervas buenas y usemos el don concedido (1 Pedro 4:10). 

¿Cómo podemos identificar nuestros dones? 

  • Orando y pidiendo al Espíritu Santo que nos ayude a descubrirlos y a desarrollarlos. Él tiene interés, pues fue el dador. Él lo hará dándonos oportunidades, enviando invitaciones, orientando por la Palabra y por medio de personas consagradas. 
  • Informándonos sobre el asunto. Cuando buscamos informaciones sobre el tema, sobre los más diversos dones, tendremos una visión más adecuada, pudiendo, inclusive, pedir al Espíritu Santo que, según su voluntad, nos conceda determinados dones. 
  • Descubriendo lo que da satisfacción. La mayoría de las veces, sus dones espirituales están conectados a algo que nos gusta hacer o nos gustaría realizar. Pero, debemos tener el corazón abierto para actividades que nunca imaginamos.  
  • Buscando la opinión de otras personas. Con frecuencia, las personas notan los dones que poseemos antes de que tengamos esa percepción. Eso puede ocurrir porque pensamientos de inadecuación bloquean esa visión, incluyendo la valentía para exponernos para intentar algo. También es común que esos dones no sean reconocidos por los deseos personales, o sea, “yo quería hacer eso, no aquello”, lo que en ese caso puede caracterizarse como una negación en usar lo que se posee.  
  • Involucrarse en muchos ministerios diferentes. Esa actitud es fantástica. Además del conocimiento y el posible descubrimiento de nuestros dones, podemos desarrollar muchas habilidades. La seguridad de que nuestro don se manifestará al dar tiempo para obtener experiencia en el área.  
  • Hacer una prueba de dones. Hay varias pruebas y son valiosas. Pueden abrir la mente y dar un indicativo del “paquete celestial” que se tiene en manos.  

Difícilmente descubriremos los dones al inicio de la experiencia cristiana. A veces tendremos que pasar por circunstancias especiales. Es importante que estemos dispuestas a enfrentar nuevos desafíos y salir del plan de que un don siempre estará relacionado a lo que nos gusta hacer. Recordemos que Dios nos enseña a amar a las personas, así como también a gustar de las actividades. 

Nuestro don espiritual solo podrá ser confirmado en el ambiente real donde se lo pone en práctica. No esperemos estar siempre en calma y tranquilas en el desempeño de alguna actividad, aunque ella esté relacionada con nuestro don. Es necesario tiempo, paciencia, perseverancia y confianza en Dios, y en lo que él nos dio. Después de un tiempo considerable de experiencia, podremos descubrir qué dones apreciamos más, esos en donde tendremos mejores resultados. No olvidemos que lo que el Espíritu Santo nos dé armonizará con nosotros. 

Inventario de dones 

Podemos seguir en la dirección correcta al utilizar una prueba de dones espirituales. Por eso, responda con sinceridad las preguntas que siguen. No existe respuesta correcta o equivocada; solo lo que es o no es más fácil o verdadero para usted. Después de responder, llegará a un GRUPO DE DONES. Cada grupo está compuesto de 2 a 5 dones diferentes, que están muy relacionados unos con los otros, y que muchas veces se sobreponen uno al otro. En ese grupo podrá      identificar sus dones específicos. 

Si la afirmación con relación a su persona es:  

  • Siempre falsa, no se aplica a usted. Haga un círculo en el número 1. 
  • Frecuentemente falsa, haga un círculo en el número 2. 
  • Ocasionalmente verdadera, y ocasionalmente falsa, haga un círculo en el número 3. 
  • Frecuentemente verdadera, haga un círculo en el número 4. 
  • Siempre verdadera, haga un círculo en el número 5. 

Vamos a los resultados: coloque en cada rectángulo el número que escogió.

Sume los números de cada columna y ponga el resultado en el cuadro que dice ‘TOTAL’. 

Vamos a conocer los grupos de dones

Grupo Enseñar

DON DE ENSEÑAR 
Personaje: Eunice

Es la capacidad de transmitir  informaciones que  son importantes para el crecimiento de la iglesia, de manera que otras personas puedan aprender.  La mujer con este don tiene cuidado de prestar la información correctamente, hablando de tal forma que el otro logre entender. Tiene la habilidad de comunicarse en el nivel de su oyente y hacer el tema interesante. Además, vive el evangelio, enseñando a través de la manera más elocuente, por ejemplo.    
DON DEL CONOCIMIENTO 
Personaje: Hulda 

 
Es la capacidad de estudiar y   comprender la Palabra de Dios, de descubrir, recibir, analizar y formular informaciones e ideas que son importantes para el bienestar y el crecimiento espiritual de las personas y de la iglesia. La mujer con este don puede estudiar y comprender la Palabra de Dios, u otro tema, que sea relevante para la vida de las personas. Esta mujer logra juntar las partes de un tema, responder preguntas y probar tópicos de la Biblia. Llega a ser una bendición para otros al presentar las verdades espirituales y de la vida cristiana a las personas, ya sea de la iglesia o no. 

Grupo de Pastorear y Evangelizar

DON DEL EVANGELISMO 
Personaje: Mujer Samaritana 

 
Es la capacidad de exponer el evangelio a través de diferentes medios para atraer personas a Cristo, haciendo que se comprometan con el Señor y se unan a la iglesia. La mujer con este don tiene la facilidad de comunicar el evangelio y apelar a las personas para que se decidan por Cristo. Con frecuencia, las personas le preguntan cómo pueden ser cristianas. Por medio del Espíritu Santo, esa persona puede llevar a otras a asumir un compromiso con Cristo.  
DON DE PASTOREAR
Liderazgo Espiritual

Personaje: Débora 

 
Es la capacidad que la habilita, basada en su autoridad espiritual, a ser conocida por la iglesia de forma voluntaria como líder espiritual. A la mujer con este don le gusta o gustaría dedicar la mayor parte de su tiempo nutriendo espiritualmente a los miembros de la iglesia. Se preocupa mucho por la promoción de la unidad en la iglesia y lucha contra cualquier elemento que amenace esa unidad. Le gusta ayudar a los nuevos en la fe en sus dificultades, temores o dudas. Tiene la característica de promover un efecto tranquilizador y fortalecedor en los que están a su alrededor. 
DON DE HABLAR EN FAVOR DE CRISTO
Profecía
Personaje: Elena de White    

Es la capacidad para hablar en favor de Dios, de recibir por medio del Espíritu Santo un mensaje para instruir, animar y confortar a la familia de la iglesia.   La mujer con este don tiene la capacidad de exhortar, enseñar y consolar cuando predica. Dice la verdad y logra hablar sin rodeos, para mejorar la situación. Explica y aplica los textos bíblicos a la vida, de manera clara, lógica y poderosa. Las personas que la escuchan se sienten motivadas cuando habla.  
DON DEL MINISTERIO INTERCULTURAL 
Personaje: Priscila 

Es la capacidad de compartir el evangelio, en otro país o cultura, aceptando, alegremente, los mayores ajustes, que aparecen al vivir en un lugar nuevo, con estilo de vida diferente.  La mujer con este don logra vivir feliz en circunstancias primitivas o enfrenta bien la separación de los amigos y la familia, a fin de compartir el evangelio en otras tierras. Se siente a gusto con personas de razas y culturas diferentes a la suya, y tiene la capacidad de comunicarse bien con personas de todos los segmentos de la vida.   
DON DE LENGUAS 
Personaje: Niña cautiva

Es la capacidad de hablar o interpretar otro idioma. La mujer con este don tiene la capacidad de aprender un idioma nuevo con facilidad. Entonces puede leer, traducir y logra comunicarse con personas que hablan diferentes lenguas.  Normalmente, decimos que esta persona nace con el talento natural para eso y lo transforma en don cuando lo utiliza para el desarrollo de la evangelización. Por otro lado, dependiendo de la situación, el Espíritu Santo puede conceder la interpretación para el grupo del idioma que está siendo hablado, o puede conceder el don para que el que habla pueda comunicarse, en el idioma nativo, sin haberlo aprendido anteriormente.   

Grupo de dar Apoyo

DON DE LA HOSPITALIDAD 
Personaje: Sunamita 

Es la capacidad de alcanzar a otros, especialmente Extranjeros con la amistad. Es abrir la casa y dar la bienvenida a las personas que necesitan de alimento y abrigo, de manera natural, como si fuera de la familia.  La mujer con este don naturalmente tiene el deseo de atender las necesidades inmediatas de las personas en vez de ayudarlas en la planificación. Le gusta abrir su hogar para quien necesita hospedaje y atender extranjeros. A las personas les gusta estar allí y participar de las actividades o reuniones en su casa, porque su amor y cuidado se notan en su atención, no por obligación, sino por placer.   
DON DEL SERVICIO 
Personaje: Febe

Es la capacidad de identificar y atender las necesidades de otras personas que no fueron suplidas. Habilidad de emplear los recursos disponibles para atender estas necesidades.  La mujer con este don está dispuesta a enfrentar con alegría inconvenientes personales, a fin de ayudar a satisfacer necesidades presentes. Cuando se le designa algo, preferirá ayudar en alguna área en vez de liderar. Está dispuesta a usar sus talentos naturales, como música, artes, cocina y otros, para servir a la iglesia. Se impresiona profundamente con textos referentes al servicio a otros y tiene tendencia a involucrarse según sus convicciones. 
DON DE OFRENDAR 
Personaje: Lidia

   
Es la capacidad de dar generosamente para ayudar a algún necesitado o contribuir a un proyecto para el reino de Dios.  La mujer con ese don siente muchas veces que es la respuesta a oraciones específicas. Tiene la capacidad de hacer buenas inversiones con el objetivo principal de compartir sus ganancias. Es sensible a atender las necesidades de otras personas o de la iglesia, sin publicidad. Esta mujer es capaz de dar sin esperar algo a cambio y sin insistir en cómo se usará la dádiva.   
DON DE LA COMPASIÓN Y LA MISERICORDIA 
Personaje: Rebeca  

Es la capacidad de tener la verdadera empatía por los sentimientos de otros, cristianos y no cristianos, y sus necesidades.   La mujer con este don comparte las experiencias y luchas íntimas de las personas, porque ven en ella empatía y comprensión. Muchas veces, puede no ser decidida y firme porque teme ofender a los demás, pero siempre es movida a compasión por los necesitados, especialmente por los que pueden ser rechazados por la sociedad.  
DON DE LA INTERCESIÓN
Oración
Personaje: Ana  

Es la capacidad de orar por determinados pedidos y experimentar respuestas de oraciones específicas. Es dedicar mucho tiempo en oración por necesidades específicas de otras personas.  La mujer con este don logra hablar con facilidad con Dios, exponiendo pacientemente las alabanzas y pedidos. Ella ora de manera personal y definida y no menciona las cosas de manera genérica o vaga. Esta mujer logra estar mucho tiempo orando, rogando por las necesidades de otras personas. Conoce también muchos casos en los cuales sus oraciones fueron respondidas. Sabe que su comunicación con Dios incluye los detalles de la vida diaria, como también decisiones grandiosas. 
DON DE LA HABILIDAD MANUAL
Personaje: Dorcas  

Es la capacidad de usar las manos, en trabajos prácticos, para beneficio de la iglesia y de las necesidades de otros.   La mujer con este don puede presentar la capacidad en artesanías, jardinería, costura, cocina, decoración, etc. No toda mujer que trabaja diariamente en una de estas áreas las está usando como un don espiritual. Sin embargo, si dedica parte de su tiempo para usar esta habilidad sin algún ingreso financiero, para ayudar a las personas en sus necesidades, inclusive enseñándoles para que obtengan sustento por medio de esta actividad, o también si está contribuyendo para el beneficio de la iglesia, entonces puede considerarse como un don. 
DON DE LA MÚSICA 
Personaje: María 
 
Mulher com lenço na cabeça

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Es la capacidad de edificar o consolar a otros y alabar a Dios a través de la voz o de algún instrumento musical. La mujer con este don, así como la de habilidad manual, nació con esta habilidad natural que el Señor le concedió, pero que puede ser transformada en don espiritual. Esta persona siempre tiene un canto en el corazón y usa su voz, o su instrumento musical para expresarse y llevar ánimo, alegría y esperanza a las personas, enriqueciendo los cultos en la iglesia y compartiendo el evangelio por medio de sus dones musicales. 
Nada impide que una persona aprenda a tocar y desarrollar su afinación vocal para honrar a Dios. 

Grupo de Consejería

DON DE DISCERNIMIENTO 
Personaje: Noemí  

Es la capacidad de captar las necesidades de las personas y ministrarlas eficazmente, tanto para el crecimiento de la persona a quien aconseja, como también para el crecimiento de la iglesia como un todo. Esta persona es capaz de conocer si determinado comportamiento procede de Dios, si es humano o satánico.   La mujer con este don es capaz de ayudar a otros, especialmente en determinados problemas emocionales y espirituales. Puede distinguir correctamente el espíritu de la verdad del espíritu del error, antes que la diferencia sea captada por otros. Puede identificar con eficiencia a los miembros de iglesia para determinados cargos, los que serán bien atendidos.  
DON DE ACONSEJAR 
Personaje: Abigail 

Es la capacidad de alentar, motivar, exhortar e inspirar a las personas a vivir de acuerdo con la voluntad del Señor.  La mujer con este don tiene la facilidad de ayudar a fortalecer comportamientos positivos, en vez de criticar comportamientos negativos. Ella logra hacer llamados eficaces al instar públicamente a que sigan cierto curso de acción. Esta mujer tiene la habilidad de alentar a quien está herido y animar a quien está desanimado.  
DON DE SABIDURÍA 
Personaje: Jocabed  

Es la capacidad de percepción para dar consejos prácticos, que promuevan el crecimiento individual y la armonía entre las personas. Es la habilidad de aplicar principios a situaciones diversas, sabiendo qué conocimiento se aplica mejor a una determinada situación. La mujer con este don sabe cuándo asumir una posición no comprometedora y cuándo cambiar de posición. Ella logra prever con excelente agudeza los resultados a largo plazo de una decisión. Puede aplicar lo que aprendió a situaciones prácticas de la vida y logra ver todo en la vida desde la perspectiva bíblica.  

Grupo de Liderar

DON DE LIDERAZGO 
Personaje: Ester

Es la capacidad para liderar un grupo o una congregación, de tal forma que promueva el crecimiento espiritual y la armonía general. La mujer con este don acepta que las personas la busquen para que les dé su parecer. Tiende a asumir la responsabilidad si no existe liderazgo estructurado. Se siente confiada para conducir la discusión; armoniza los varios puntos de vista, llega a conclusiones y delega autoridad. Asegura que haya espíritu de unidad y de entusiasmo cuando está en el liderazgo. 
DON DE LA ADMINISTRACIÓN
Personaje: Acsa 

Es la capacidad de entender los objetivos para áreas específicas del ministerio y de elaborar planes eficientes para alcanzarlos. Esta persona puede dirigir grandes áreas de la obra de Dios de forma que inspira a los miembros, promoviendo el progreso y la unidad.  La mujer con este don normalmente es organizada en su vida personal. Por eso mismo, es muy consciente de la eficiencia y el orden o falta de ellos en la iglesia. Tiene la capacidad de ver como los elementos se encajan en el cuadro total y como trabajar, de forma lógica, con blancos de largo alcance. También es capaz de delegar responsabilidades con eficiencia.  
DON DE LA FE 
Personaje: Rahab  

Es la capacidad de reivindicar las promesas de Dios y avanzar confiada con los planes de su reino.  La mujer con este don confía a Dios todas sus necesidades. Muchas veces la impacienta el pensamiento metódico y precavido, pero está convencida de que casi toda la tarea imposible puede ser realizada. Ella ve esperanza en situaciones aparentemente imposibles.  

¿Ya descubrió sus dones? ¿Puede identificarse con algunas de esas personas? 

El Señor espera que usemos los dones para beneficio de otros, como también para nuestro crecimiento espiritual y preparación para encontrarlo. No dejemos de usarlos por falta de tiempo, porque estamos tan ocupadas con las demás actividades profesionales que no tenemos disposición para servir. El “Bien, buen siervo y fiel” está conectado al uso que hemos hecho con lo que el Cielo nos regaló. 

Cuando Jesús regrese, no habrá más dones espirituales. Se nos cambiará el regalo espiritual por una corona, y seguramente estará llena de estrellas.  

REFERENCIAS: 

Kendel, Birthe - Dons Espirituais, DEPARTAMENTO DEL MINISTERIO DE LA MUJER, Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD  <www.adventistwomenministries.org/>.