Dr. Hildemar Dos Santos, profesor de Loma Linda University

Durante muchos años me preocupé de no prescribir pastillas de calcio a mis clientes. Siempre opté por alimentos, pero la presión “calcífera” ha sido grande. Los números aumentaron enormemente y ahora se habla de 1.500 miligramos por día, especialmente para prevenir la osteoporosis en las mujeres.

En mis charlas digo que el calcio se absorbe solo si el cuerpo necesita el mineral. Esto solo sucede si la persona realiza ejercicio físico intenso. De esta forma, el cuerpo nota que tanto el músculo como el sistema óseo necesitan del mineral para sus funciones, y la absorción del calcio aumenta.

Por otro lado, si no se hace ejercicio, el cuerpo no requiere calcio y no sirve tomarlo o comerlo en exceso. Vea por ejemplo que en la mayoría de los países desarrollados, las mujeres toman dosis enormes de calcio y su índice de osteoporosis y fracturas, en general, es mayor que el de los países donde se consume menos calcio, pero las personas son más activas. La diferencia es el ejercicio.

Pero, ¿para dónde va todo ese calcio si no se deposita en los huesos? Yo siempre decía que ese calcio va a parar en las articulaciones, en los riñones y en las arterias. Para comprobarlo existe un examen que se hace de las arterias coronarias que expresa el estado de las mismas para calcular el riesgo de un ataque cardíaco. Este examen radiográfico que mide los depósitos de calcio en las coronarias evalúa la abertura de las arterias. Si existe un depósito elevado de calcio habrá mayor riesgo de un ataque cardíaco.

Gran parte del exceso de calcio ingerido termina en el intestino y es eliminado, pero el mineral puede depositarse en el cuerpo. Un estudio científico demostró que hoy la ingestión de cápsulas de calcio de más de 1.000 mg por día puede ayudar a prevenir la osteoporosis pero aumenta el riesgo de ataques cardíacos. Los investigadores y médicos están cambiando el consejo antiguo sobre el calcio y recetando alimentos ricos en calcio en vez de píldoras. En casos extremos de personas con alto riesgo de osteoporosis, el consejo es tomar entre 500 o 600 mg por día.

Así, me quedé contento con las buenas noticias, por el hecho de que no necesitamos de píldoras de calcio, y sí una alimentación saludable y más ejercicio. Los alimentos que tienen calcio son los derivados de la leche que deben ser descremados, de verduras oscuras (brócoli, repollo, etc.). Las nueces son buena fuente y el tofu, si está enriquecido o fortificado con calcio, es otra opción.

La calcificación es real, y no ocurre solo en los huesos, sino en otros órganos vitales. Así, considero que cuando la calcificación se obtiene por medio de pastillas, es falsa o como dice el título, es una falsificación. Por lo tanto, no use lo que es falso sino busque lo original.

Si usted todavía quiere continuar con sus súper pastillas de calcio, no hay problema, pero, si sobrevive al ataque del corazón, tiene el riesgo de piedras renales, seguidas de artritis y de calcificaciones articulares. Si todavía no está convencido, preste mucha atención al ejemplo de la naturaleza. Observe que el elefante, el rinoceronte, y lo mismo la vaca y el buey no consumen ninguna píldora de calcio y tienen los huesos fuertes y sanos. Sus secretos: pasto y movimiento. No lo mando a usted a pastar, pero, ¿quién sabe?