La guerra interestelar de la que habla la Biblia no terminará en destrucción, sino en redención. El Gran Comandante reconquistará el territorio usurpado por el enemigo cuando la humanidad cayó, en el Edén, y se convirtió en rehén del mal. La última batalla se acerca. Las profecías revelan que el Cordero de Dios saldrá victorioso. Prepararse para estar del lado ganador, sin embargo, depende de cada uno de nosotros. Esta semana nos ayudará a alcanzar esa meta y nos conducirá en un entrenamiento avanzado para la buena lucha de la fe, como soldados fieles.

Prepárate bien para cada tema, aprovecha al máximo los recursos, ideas y contenidos aquí ofrecidos. Cultiva en tus adolescentes el deseo de estar del lado correcto en el conflicto entre el bien y el mal, siempre recordando que tenemos con nosotros a Aquel que ya ha vencido por nosotros.