La iglesia no sólo se preocupa con la libertad religiosa de los miembros, organizaciones y entidades que mantiene, sino también apoya el derecho sin restricción a la Libertad Religiosa para todas las personas, independientemente de su afiliación religiosa.
En 1893, fue organizada y patrocinada por la Iglesia Adventista del Séptimo día la Asociación Internacional de Libertad Religiosa (Irla). Su propósito es universal y no sectario dedicado a la causa de la libertad religiosa. Irla tiene representación permanente en las Naciones Unidas y organiza conferencias, congresos, festivales de libertad religiosa, además de haber publicado una gran variedad de literatura. Son parte de la dirección de Irla, en su Consejo Administrativo, diversos segmentos religiosos. Es una organización sin fines de lucro y está activo por medio de sus afiliados en más de 200 países.